FOTOGRAFÍA AÉREA 


Se obtiene por la realización de un vuelo fotogramétrico, es decir, un vuelo en el que un aeroplano sobrevuela una zona tomando repetidas fotos para componer toda la superficie.
Dicha fotografía es la representación cónica de la realidad y por lo tanto está afectada por las limitaciones debidas a la perspectiva, a las que hay que sumar las deformaciones del relieve del terreno (objetos de las mismas dimensiones reales al estar más próximos al objetivo aparecerán de mayor tamaño, y viceversa), la falta de verticalidad de la toma fotográfica (objetos de considerable altura como edificios y árboles aparecerán abatidos) y las distorsiones propias del objetivo de la cámara empleada. 

Imagen relacionadaEstán disponibles para los vuelos desde 1980 a 2011 en la Fototeca del IECA, siendo de especial interés para usuarios que requieran documentar fehacientemente la existencia de un objeto o fenómeno en una fecha concreta (un pozo, edificio, el trazado de un camino hoy día inexistente, una cobertura arbórea, etc), o para su explotación fotogramétrica. Aquellos usuarios que necesiten medir áreas o distancias, necesiten georreferenciar elementos, o cualquier proceso de creación de cartografías temáticas (catastro, vegetación, suelos u otros elementos) tienen que hacer uso de las ortofotografías.

La fotografía aérea puede realizarse desde altitudes muy bajas con la ayuda de una cometa o de un globo cautivo. Los diversos ángulos pueden ser: aire-tierra, aire-mar o aire-aire. Este tipo de fotografía es especialmente utilizada en el campo de la cartografía y en la vigilancia. Sin embargo, pueden señalarse otras aplicaciones como, por ejemplo, los deportes aéreos o la documentación turística. 

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